mama

Guía del Cáncer de Mama | Capítulo 1: Introducción al cáncer de mama y Autoexploración mamaria

Guía del Cáncer de Mama | Capítulo 1: Introducción al cáncer de mama y Autoexploración mamaria 150 150 Ale J.

Introducción a esta Guía

A la hora de elaborar una guía sobre el cáncer de mama, es importante tener en cuenta que más del 85% de los tumores que aparecen en la mama son de carácter benigno. No debemos asociar directamente cualquier bulto en el pecho con un cáncer de mama. Además, muchos de los cánceres de mama que se diagnostican tienen un pronóstico muy favorable si el diagnóstico se hace a tiempo. Es importante esta prevención precoz para poder actuar a tiempo.

Actualmente, los nuevos tratamientos quirúrgicos y hormonales proporcionan cada vez una mejor calidad de vida. La cirugía utilizada es mucho más conservadora o respetuosa con la mama. Esta, unida a una cirugía restauradora, hace que el impacto psicológico se reduzca considerablemente.

Bajo estas premisas, podemos decir que el cáncer de mama es un tumor importante por su frecuencia, pero con muy buen pronóstico si cuidamos nuestra salud con una serie de hábitos saludables y controles periódicos (autoexploración frecuente desde edades jóvenes y mamografías a partir de los 45 años).

Principales causas

Como la mayor parte de los tumores que nos afectan, el cáncer de mama tiene un origen desconocido. Sin embargo, sí que se han descubierto una serie de factores de riesgo. Estos factores de riesgo parecen favorecer el desarrollo de este tipo de cáncer.

Los factores de riesgo actúan de forma interrelacionada, es decir, se favorecen unos a otros. Un estilo de vida estresado propicia una mala alimentación, la cual genera desórdenes hormonales. Además, a esto debemos sumar la posible existencia de los propios factores genéticos.

Los factores de riesgo se pueden dividir en:

  • Factores de riesgo inevitables: aquellos factores que sean biológicos o hereditarios. Según la evidencia, involucrados en un 5-10% de los diagnósticos.
  • Factores de riesgo evitables: mucho más importantes a la hora de tenerlos en cuenta, ya que pueden controlarse. Responsables del 90-95% de casos diagnosticados.

Puesto que los factores de riesgo evitables son los que podemos controlar, son los más relevantes.

A continuación se enumeran algunos de los factores que pueden contribuir a la aparición y el desarrollo del cáncer. Aun así, en otros artículos entramos en mayor detalle sobre cada uno de los factores de riesgo en el cáncer.

Factores de riesgo más comunes en el cáncer de mama

  • Edad.
  • Alimentación.
  • Sedentarismo.
  • Obesidad.
  • Factores hormonales.
  • Factores ambientales.
  • Enfermedades benignas de la mama.
  • Edad de la menarquia y de la menopausia.
  • Otros cánceres previos.
  • Gestaciones.

Para saber más sobre los factores de riesgo en el cáncer, pulsa aquí.

La glándula mamaria

Para comprender realmente las características del cáncer de mama, es preciso conocer un poco mejor este órgano a nivel anatómico.

La glándula mamaria es en realidad un conjunto de diminutas glándulas, que forman racimos unidos por conductos galactóforos al pezón (estos conductos son los que transportan la leche). Descansa sobre unos músculos que se encuentran delante de las costillas: el pectoral mayor y el pectoral menor.

Distribución de las glándulas y los conductos galactóforos, que acaban uniéndose en el pezón.

En la mujer adulta, las glándulas mamarias han crecido por efecto de las hormonas durante la pubertad. La piel que cubre la mama presenta en el centro un pequeño relieve, llamado pezón. En él se concentran todos los conductos galactóforos de la glándula mamaria. Rodeando el pezón encontramos la aréola, un círculos de piel más oscura. Esta muestra unos pequeñísimos relieves llamados tubérculos (sin ninguna función especial).

Si observamos la mama ”de frente”, posee una forma circular dividida en nódulos internos. Imaginémosla como una rueda de carro imaginaria. Así, la glándula queda dividida en 15-20 lóbulos, siendo cada lóbulo el espacio entre “radio y radio de la rueda”. Estos radios separan los lóbulos y son los llamados septos fibrosos, o ligamentos suspensores de la mama.

Anatomía de la mama.

Los septos fibrosos tienen una función fundamental: separan los lóbulos para que, si hay una infección en la glándula, los gérmenes no pasen de un lóbulo a otro. Así, el absceso sólo se acumula en ese lóbulo. Para sacar el pus, se realizaría una pequeña incisión de forma radial, siguiendo la distribución natural de los lóbulos.

La mama también cuenta con vasos linfáticos. El sistema linfático es un sistema, en su mayor parte paralelo a los vasos sanguíneos, que se encarga de recoger los líquidos sobrantes y las sustancias residuales del organismo. Además de recogerlas, las transporta mediante una red de conductos hacia los ganglios linfáticos, que son una especie de ”centrales de limpieza”. En el caso de la mama, los conductos linfáticos de los diferentes lóbulos de la mama van a parar a los ganglios de la axila.

La mastectomía

Una vez conocida algunas características anatómicas de la mama, podemos comentar que existen diferentes tipos de cirugía mamaria. Cabe destacar que entraremos con un mayor nivel de detalle en este tema a lo largo de los próximos capítulos. Sin embargo, aprovechando el conocimiento anatómico recién expuesto y a modo de introducción, es buen momento para conocer los dos tipos más comunes: la mastectomía simple y la mastectomía radical.

  • Mastectomía simple: se elimina la mama en sí misma (piel con o sin pezón, grasa y glándulas mamarias con sus conductos galactóforos).
  • Mastectomía radical: se elimina toda la mama, el músculo pectoral mayor, el pectoral menor, los vasos linfáticos y los ganglios linfáticos de las axilas. Al eliminarse estos ganglios linfáticos, los vasos linfáticos transportan su contenido hacia el tórax de forma mucho más lenta (por eso el brazo puede hincharse tras la cirugía mamaria.

Tipos de cáncer de mama

Un cáncer aparece cuando una célula o conjunto de células comienzan a desarrollar una actividad anormal en su proceso de reproducción o división celular. Las células cancerosas se caracterizan por tener una descontrolada proliferación (capacidad de reproducción elevada) y alteraciones en el proceso de apoptosis (muerte celular). Tienden a agruparse formando nódulos, masas o tumores.

Si quieres saber más sobre conceptos como la división celular o la apoptosis, te recomendamos que visites nuestra entrada: “¿Qué es el cáncer?“. Puedes hacerlo clicando aquí.

En el caso del cáncer de mama, estas células surgen normalmente en los conductos galactóforos. Desde allí, se pueden extender o bien a las glándulas o bien al organismo, utilizando los vasos linfáticos y sanguíneos. Este último método de expansión es lo que se conoce como metástasis.

Los principales tipos de cánceres de mama y sus características principales son los siguientes:

  • Carcinoma intraductal ”in situ”:
    • Se desarrolla en los conductos galactóforos.
    • Puede desarrollarse en varios sitios a la vez.
    • Supone menos del 5% de los cánceres de mama.
  • Carcinoma ductal infiltrante:
    • Es mucho más invasivo que el anterior.
    • Puede infiltrar territorios próximos.
    • Abarca el 80% de los cánceres de mama.
  • Carcinoma lobulillar ” in situ”:
    • Se extiende a lo largo de un lóbulo mamario.
    • Presenta pocos síntomas. Suele descubrirse mediante estudios en la mama.
  • Carcinoma lobulillar infiltrante:
    • De naturaleza y localización como el anterior pero más agresivo.
    • Puede desarrollarse en varios puntos de la mama y afectar a la otra.
    • Representa un 5% de los cánceres de mama.
  • Tipos especiales:
    • Carcinoma inflamatorio de la mama.
    • Enfermedad de Paget.

Prevención y autoexploración

La exploración de la mama debe ser una costumbre habitual entre todas las mujeres. Tiene particular interés realizarlo cada 3-4 meses a partir de los 20 o 25 años. Gracias a ella, muchas de las patologías se detectan de manera precoz y hay tiempo suficiente para eliminarlas con éxito. La exploración cuenta con dos fases importantes:

a) Fase de inspección

  • Simetría de las mama: con un vistazo general, comprobar que ambas mamas son simétricas.
  • Valoración de la piel: comprobar que no hay depresiones, zonas calientes o enrojecidas.
  • Estado de los pezones: deben tener una forma regular, cilíndrica, con color uniforme. La alteración más frecuente que sufren los pezoness es la retracción de los mismos. Esto se debe a que las lesiones en los conductos galactóforos tiran del pezón hacia dentro.

A la hora de realizar la inspección, es importante hacerlo delante de un espejo, con los brazos relajados. Además, deben observarse también con las manos detrás de la cabeza.

b) Fase de palpación

Recordando la anatomía de la glándula mamaria (como una ”rueda” distribuida en 15-20 nódulos), la palpación debe realizarse de forma circular, pasando de lóbulo a lóbulo. Para ello, dividiremos de forma imaginaria la mama en cuatro cuadrantes, justo como aparece en la imagen:

Al practicar la palpación es recomendable comenzar por el cuadrante superior externo (el que está sombreado en la fotografía). Este cuadrante es el más propenso a presentar carcinomas (más del 60% de todos los casos). En la palpación es importante valorar:

  • La piel: si la mama se encuentra sana, la piel que la recubre es móvil y suave. Esto le permite desplazarse con facilidad sobre el tejido que tiene debajo. En el caso de tumores, se pierde parte de esta movilidad.
  • El pezón: el pezón normal no duele ni muestra irritación alguna. En el caso de patologías internas, puede presentarse retraído, dolorido o irritado.

Próximo capítulo

Esto es sólo el primer capítulo de la guía del cáncer de mama. Próximamente se irá completando, ampliándose la información y añadiéndose los posteriores capítulos en futuras actualizaciones.

Si aún no sabes quiénes somos y en qué consiste exactamente el proyecto de Efecto Positivo, puedes descubrirlo en nuestra primera entrada del blog.

Si padeces o tienes alguna persona cercana en tu entorno con diagnóstico de cáncer de mama, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Estaremos encantados de ayudarte ante cualquier duda.

Para contactar con nosotros, puedes llamar por teléfono al 954 45 64 65, o también puedes contactar por vía WhatsApp a través del 678 38 10 50.

Si lo prefieres, puedes reservar tu cita con nosotros directamente a través del siguiente enlace.

Reservar cita

*La mayoría de información expuesta en esta guía se ha elaborado con la ayuda de la Guía del cáncer de mama, escrita por el Dr. Pedro Ramos y el Dr. Antonio Ruiz, así como la mayoría de fotos utilizadas a lo largo del post. Desde Efecto Positivo les estamos completamente agradecidos y queríamos hacerle una mención especial, a pesar de que se han usado otras muchas fuentes para completar la información y ofrecer una guía completa, integral y actualizada.

Back to top
Privacy Preferences

When you visit our website, it may store information through your browser from specific services, usually in the form of cookies. Here you can change your Privacy preferences. It is worth noting that blocking some types of cookies may impact your experience on our website and the services we are able to offer.

Esta web utiliza cookies y otras tecnologías con fines estadísticos y publicitarios de conformidad con nuestra política de privacidad.